La jubilación flexible es una posibilidad atractiva para las personas que no quieren pasar a la inactividad al alcanzar la edad de jubilación.
- ¿Te preocupa sentir que tienes demasiado tiempo libre en el futuro?
- ¿Te gusta tu trabajo y te gustaría seguir vinculado a él de algún modo?
Entonces lee bien lo que tenemos que decirte sobre la jubilación flexible.
Qué es la jubilación flexible
La jubilación flexible es una modalidad de jubilación en la que se puede compatibilizar una actividad laboral con la recepción de la pensión por jubilación. Si te acoges a ella, recibirás ambos ingresos.
Entre sus características más significativas, está que la actividad no se puede ejercer a tiempo completo, sino parcial. El porcentaje de jubilación que se perciba se corresponderá proporcionalmente con la jornada en la que estés.
Por ejemplo, si tu jornada parcial queda reducida en un 50%, lo que recibirás de pensión será un 50% del total, es decir, de la cantidad que percibirías si estuvieras jubilado totalmente.
La pensión por jubilación flexible es incompatible con pensiones de incapacidad permanente, de incapacidad temporal o de maternidad, derivadas estas últimas de una actividad a tiempo parcial.
Diferencia entre jubilación flexible y parcial
Hay diferentes formas de compatibilizar la pensión por jubilación con una actividad laboral, por lo que suelen confundirse.
Una de las diferencias más importante entre la jubilación flexible y la jubilación parcial es la edad de jubilación.
Requisitos para la jubilación flexible
La jubilación flexible se aplica a todos los regímenes de la Seguridad Social, excepto a aquellos especiales de los funcionarios civiles del Estado, las Fuerzas Armadas y el personal al servicio de la Administración de Justicia.
Además de no tener ninguno de los perfiles anteriores, para poder acogerte a ella debes cumplir los siguientes requisitos:
- Comunicar a la Seguridad Social el plan de comenzar un trabajo a tiempo parcial cuando ya se tiene la condición de jubilado y se está percibiendo la pensión.
- Estar jubilado y cobrando la pensión.
Jubilación flexible para autónomos
Por sus propias características y la manera en que está regulada, la jubilación flexible para autónomos no es posible. Sí podrás acogerte a ella si, una vez te jubilas, una empresa te contrata a tiempo parcial y puedes compatibilizarlo con la pensión.
Pero, ejerciendo tu propia actividad por cuenta propia, no es posible.
Tienes una alternativa en la jubilación activa. Es una modalidad a la que puedes acogerte desde 2013, y que contribuye a la sostenibilidad del sistema de pensiones.
Debes tener cumplida la edad ordinaria de jubilación y todos los años que se exigen para acceder a ella.
Procedimiento: cómo solicitarla
Insistimos en que, si estás jubilado, tienes que comunicar al Instituto Nacional de la Seguridad Social tu intención de acceder a la jubilación flexible. Para ello, puedes solicitar cita previa en el 901 10 65 70 o rellenando el formulario en este enlace.
Es necesario que lo comuniques. De lo contrario, se considerará que tu pensión tiene carácter indebido, y te obligarán a que devuelvas todo lo que has percibido indebidamente.
Cuantía y cotización
Conocer en cuanto se quedará la jubilación flexible es sencillo. Solo tienes que restar a la cuantía el porcentaje correspondiente de tu jornada laboral.
Por ejemplo, si estás cobrando de pensión 1300 euros y tu jornada es del 50%, esta pasará a reducirse a la mitad 650 euros.
Una vez que vuelvas a la jubilación total, hay que volver a calcular la pensión. Con los datos del último empleo se vuelve a calcular la base reguladora.
No es posible percibir una cantidad menor a la anterior. Si al hacer el cálculo resultara más baja, se mantiene la anterior, así que no será perjudicial.
Con todo, la jubilación flexible es una opción para quienes no deseen pasar a la inactividad al jubilarse. Podrás vincularte profesionalmente a una empresa y, a la vez, seguir cobrando tu pensión de jubilación.
Será en una cuantía inversamente proporcional al porcentaje de jornada en el que estés.